Reserva de la biosfera
Una de las zonas más desconocidas de España por su situación geográ ca, ha contribuido a preservar aún más sus valores naturales en plena costa mediterránea. Enclavada en el litoral almeriense, esta reserva cuenta con abruptos acantilados de hasta 200 metros, ensenadas, playas vírgenes, salinas y arrecifes con una abundante ora autóctona.
La población residente en el interior del espacio protegido es de unos 4.000 habitantes, aunque en épocas vacacionales se llega a multiplicar por diez. Es el espacio protegido marítimo-terrestre de mayor super cie del Mediterráneo Occidental europeo.
Destacan dos valores fundamentales: su carácter semiárido, un espacio protegido en Europa subdesértico y estepario y porque cuenta con una franja costera de 50 kilómetros acantilada con fondos marinos muy bien conservados.
En esta reserva, además del Parque Natural Marítimo Terrestre existen las guras de protección: Zona de Especial Protección para las Aves y Zona Húmeda de Importancia Internacional. La Junta de Andalucía en 1987 declaró este territorio Parque Natural. La sierra del Cabo de Gata constituye la formación volcánica de tipo calco-alcalino más importante de la Península Ibérica, alcanzando El Fraile (493 m) su cota más alta. El primer Parque Natural marítimo-terrestre de Andalucía cuenta con una de las costas con mayor contraste de colores y luminosidad, presidido por el Cabo de Gata con acantilados jalonados, calas solitarias y pequeñas, con el clima más árido de toda Europa que recuerda a otros parajes como Oriente Medio o el Norte de África. A pesar de la aridez, la vida está presente en estos parajes desérticos y volcánicos con coladas de lava, donde las especies se han adaptado a las condiciones más extremas de calor y ausencia de agua dulce. Cerca de la capital almeriense se encuentra esta reserva, un gran paraje volcánico que se extiende por tres municipios: Almería, Carboneras y Níjar.